RENFE DICE QUE LA HUELGA DEL 17 Y 18 DE SEPTIEMBRE NO TIENE UN MOTIVO REAL
- La compañía insiste en que la plataforma reivindicativa de CCOO, CGT y Semaf, que cuesta 40.000 millones, es inasumible
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
La dirección de Renfe aseguró hoy que la huelga convocada por el comié de empresa de la compañía, con el apoyo de CCOO, CGT y Semaf, para el 17 y 18 de septiembre (desde las seis de la mañana del día 17 hasta las siete de la mañana del día 18) "no tiene un motivo real".
En un comunicado difundido hoy, Renfe explica que esta huelga no tiene justificación, ya que "se mantiene ligada a una plataforma reivindicativa que ha ido variando a lo largo de la negociación, a medida que la empresa respondía a todos los puntos planteados por los convocantes".
Renfe recuerda quela empresa ha propuesto a los sindicatos, en las negociaciones del XIII convenio colectivo, el mantenimiento del poder adquisitivo para los dos años de convenio, la revisión del sistema de primas y la disposición a considerar medidas de reajuste en la jornada laboral a cambio de una mayor flexibilidad de la misma.
Además, Renfe asegura que ha reiterado los compromisos que adquirió con los secretarios generales de los cuatro sindicatos presentes en el comité de empresa para garantizar el consenso en lo procesos de externalización de trabajos a empresas privadas, procesos a los que CCOO, CGT y Semaf se oponen y que son una de las razones de la convocatoria de la huelga, junto con el bloqueo del convenio.
Renfe, que valora que el sindicato UGT no apoye la huelga y se mantenga en la vía del diálogo, cifra en 40.000 millones de pesetas el coste de la plataforma reivindicativa de CCOO, CGT y Semaf, lo que supondría un 33% de crecimiento sobre los gastos de personal del presente ejercicio.
Para la drección de Renfe, esta plataforma es "desproporcionada e inasumible" por la empresa y constituye "un mero elemento de justificación de los paros". La compañía lamenta que, con esta actitud de los sindicatos convocantes del paro, se quiebre el clima de diálogo de los últimos años y se emprenda un proceso de negociación basado en el conflicto.
Con esta huelga, que se suma a la de julio, CCOO, CGT y Semaf quieren desbloquear las negociaciones del convenio. Los sindicatos piden una mejora del poder adquistivo, la jornada laboral de 35 horas, un sistema de primas para todas las categorías y empleados de Renfe, un sistema de compensación de horas extras por tiempo libre, que las bajas por jubilación se cubran al cien por cien y que se paralicen los concursos de externalización de tareas en algunos servicios de cercanías.
(SERVIMEDIA)
13 Sep 1999
NLV