En una entrevista a la Cadena Ser, Kareaga, del PNV, intentó justificar u decisión señalando que, al ceder el salón de plenos del ayuntamiento para el homenaje a Rementería, esperaba dejar claro que corresponde a Euskal Herritarrok, promotora de la iniciativa, cualquier altercado que se produzca si hay "jaleo" el día del acto en recuerdo del etarra.

Al preguntarle directamente el entrevistador si se sintió amenazado para tomar la decisión de ceder el salón del ayuntamiento, Kareaga contestó: "bueno... si, si. Quiero dejar bien claro que la directiva del PNV nos exigía queno les dejásemos en el Salón, puesto que sólo es para electos y para fallecidos en atentados, pero nosotros hay que decir que no somos unos héroes. Por presiones que hemos tenido, de amenazarnos en manifestaciones, insultos, etcétera, vimos que sí les dejábamos el Salón, si hubiese algún jaleo el día del homenaje o como le quieran llamar, los responsables eran ellos o quienes vayan".

"Si no les dejamos", añadió, "seguro que durante días habrá follones, jaleos, manifestaciones, etcétera. Entonces, cualuier desgracia que pudiese ocurrir, la culpa sería nuestra. Como me decía una señora: 'será por tu terquedad".

Al preguntarle si cree que el etarra fallecido el pasado 7 de agosto al estallarle la bomba que transportaba con otros tres terroristas se merece un homenaje, Kareaga respondió: "Patxi Rementería ni nadie de ésos se merece un homenaje. Nosotros no nos adherimos a ese homenaje".

A la cuestión de si tiene miedo, el alcalde contestó: "pues no... ¿miedo...? En el fondo, sí. A uno de mi grupola víspera le dio una lipotimia (...) Pero yo comprendo que hay muchísima gente que está en bastante peor situación que yo, más amenazada".

Sobre si estaría dispuesto a dejar el cargo, señaló que "nosotros no somos gente que nos agarremos a estos puestos", sino que están ellos "para solucionar problemas cotidianos, pero ha surgido esto, y esto es ya el no va más".