LAS RELACIONES PP-CiU SIGUEN SIENDO "CORDIALES", SEGUN EL PRESIDENTE DE NUEVAS GENERACIONES
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El presidente de las Nuevas Generaciones del Partido Popular (NNGG), Juan Manuel Moreno Bonilla, manifestó hoy que que hay "muchos puntos de encuentro programáticos e ideológicos" entr el PP y CiU, y que en las reuniones entre sus dirigentes se aprecian un clima "sincero" y "cordial".
En declaraciones a Servimedia, Moreno Bonilla desvinculó el posible adelanto de las elecciones autonómicas catalanas del pacto de gobernabilidad de CiU con el Ejecutivo central.
"No puede haber unas elecciones en una comunidad tan importante como Cataluña sin que el clima electoral se note en el resto de España", aseguró. Sin embargo, aunque haya "cierta tensión" no tiene por qué derivar necesarimente en una convocatoria de elecciones generales antes de finalizar la legislatura.
A su juicio, los rumores de los últimos días sobre un posible adelanto electoral obedecen sólo al interés del PSOE por crear un clima de inestabilidad del que piensa que puede sacar "rentabilidad electoral".
Por el contrario, lo cierto es que entre ambas formaciones existe "normalidad, tranquilidad, entendimiento y cordialidad" sobre todo cuando se sabe que "las cosas están marchando" y que 1998 será el año "de l consolidación de los efectos positivos de la economía".
Al interés de ambas formaciones por no crear una "inestabilidad innecesaria" se une, a su juicio, la "gran experiencia que tiene CiU en la política de pactos". "En un momento tan dulce, cualquier inestabilidad que se cree por antojo supone una falta de responsabilidad", remachó.
LEY DEL CATALAN
Las diferencias, "que las hay y no se pueden ignorar", explicó, finalmente son siempre salvadas por los dirigentes de los dos partidos, que saben mponer "la armonía y la cordialidad". Añadió que ese clima que no se ha roto, a pesar de la polémica ley del catalán, aprobada por el Parlamento autonómico con el rechazo de los populares.
En este sentido, ratificó que el PP comparte la necesidad de "normalizar" la lengua catalana y hacer que tenga "las mismas posibilidades" de desarrollo que el castellano, pero rechazan "el carácter impositivo" de la ley.
El voto en contra de la ley fue una decisión "libre y democrática" tomada por el partido, pr lo que reconoció el "desagrado" con el que han acogido las amenazas dirigidas contra los diputados populares en el Parlamento catalán.
"Como jóvenes que somos nos hemos desarrollado en la democracia y no entendemos por qué se trata de crear un clima adverso y antidemocrático en torno al Partido Popular". "Nadie puede ser coaccionado por tomas una decisión libre, plural y democrática", concluyó.
(SERVIMEDIA)
02 Ene 1998
CLC