Rejón insistió en rechazar la posibilidad de un pacto global con el PSOE y reiteró que sólo serán posibles los acuerdos concretos en aquellos municipios donde la dirección local de IU estime oportuno, "alí donde haya todas las garantías de transparencia, siempre de acuerdo al programa de la coalición y donde no se genere alarma social".

El coordinador general subrayó la ausencia de reciprocidad y que para llegar a pactos no se puede cuestionar ninguno de los puntos claves del programa electoral de Izquierda Unida. "No hay intercambio de cromos ni de sillones. No hay reciprocidad. Si ustedes descubren reciprocidad en algún sitio en Andalucía o ha habido dejación del programa de IU, a los cinco minutos e voy a dar clases a Baena (su localidad natal)", prometió.

Rejón afirmó que no admitirá el "chantaje" del presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, en torno a la oferta de negociación de los presupuestos de 1996 para la comunidad autónoma.

En este sentido, reveló que el secretario general de los socialistas andaluces pidió a Felipe González hasta en dos ocasiones en el pasado Comité Federal del PSOE que no hubiera acuerdo con IU si no se aprueban los presupuestos andaluces del 96, una niciativa que, a juicio de Rejón, es una "burla" a los ciudadanos andaluces.

Rejón cree que no queda "casi ningún resquicio" para que haya presupuestos de la Junta en 1996, por el incumplimiento de los compromisos políticos de Manuel Chaves. "Las condiciones objetivas están dadas para la disolución del Parlamento: por el incremento de votos del PSOE, por el rebloqueo de la situación política andaluza y por la intransigencia de Manuel Chaves", dijo.