El borrador fue presentado hoy por la ministra de Educación, María Jesús San Segundo, y el secretario de Estado de Universidades e Investigación al Consejo de Coordinación Universitaria.

El nuevo sistema de acreditación, que sustituirá el modelo de habilitación que puso en marcha el Gobierno del PP, dispondrá de dos fases. En primer lugar, los candidatos deberán acreditar sus méritos para, a continuación, aspirar a una plaza concreta convocada por las universidades. Estas dispondrán de dos posibilidades: fijar los criterios para asignar plazas o establecer un sistema por sorteo.

"Es un sistema de acreditación seria y rigurosa que valorará la capacidad, el mérito y la competencia de los aspirantes", subrayó Ordóñez.

Con la presentación del texto, se abre un plazo de debate sobre la reforma universitaria que durará dos meses, con el fin de que "a la vuelta de Navidades" se presente el anteproyecto de ley, en primavera se inicie el trámite parlamentario y entre en vigor al inicio del curso 2006/2007.

Además, se creará un nuevo programa, que se denominará "programa Unamuno", para propiciar la movilidad de profesores de todos los niveles entre las universidades españolas y extranjeras durante un periodo máximo de tres años.

Ordóñez aseguró que la financiación de esta iniciativa correrá a cargo del Ministerio de Educación, que convocará un concurso todos los años.

ESTUDIANTES

En cuanto al acceso de los estudiantes a la universidad, Ordóñez explicó que se tratará de "una única prueba" similar a la actual Selectividad, si bien no precisó sus contenidos porque "estarán regulados en la futura Ley de Educación".

También se creará un Consejo Estatal de Estudiantes, se elaborará un estatuto de derechos y deberes de los alumnos y se potenciará el deporte universitario, con el fin de potenciar la formación integral de los estudiantes.

Ordóñez explicó que el espíritu de la reforma de la LOU es impulsar la autonomía universitaria, potenciar la corresponsabilidad de las comunidades autónomas, ampliar la participación de la comunidad académica y implicar a la sociedad en el mundo universitario.

ANECA

Con la futura ley, la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) pasará a ser un organismo público que vele por la calidad del sistema universitario, "porque a mayor autonomía, mayor responsabilidad".

En este sentido, y con el fin de incrementar la autonomía universitaria, el texto prevé una flexibilización de los órganos de gobierno de las universidades, siempre respetando las competencias de las comunidades autónomas.

También se prevé la constitución de una Conferencia Sectorial de Universidades que se convierta en el punto de encuentro de toda la comunidad de la educación superior.

Para finalizar, Ordóñez indicó que "algún día" habrá que promover una ley "mucho más flexible todavía", si bien la universidad no estaba preparada en este momento para iniciar "otro proceso constituyente", por lo que el ministerio se ha tenido que limitar a reformar algunos aspectos de la LOU.