Además, este contrato, que tendría una indemnizaión por despido igual a la establecida legalmente en la actualidad, según explicó en rueda de prensa Matilde Soto, perteneciente al área de Acción Sindical de USO, tendría incentivos para su conversión en indefinido.

En concreto, daría lugar a una subvención de 700.000 pesetas si el contrato se hace indefinido a lo largo de los tres primeros años, de 500.000 pesetas si esta decisión se toma entre los tres y los seis años y de 300.000 pesetas en caso de que se haga entre el sexto y el noveno año.

ambién daría derecho a las reducciones de cuota a la Seguridad Social establecidas actualmente en el caso de los colectivos de jóvenes que acceden a su primer empleo, mayores de 45 años, mujeres y minusválidos.

Para acceder a estos incentivos, el empresario debe mantener al trabajador, una vez que ese contrato se haya convertido en fijo, al menos diez años. Además, USO propone que en el caso de que ese puesto de trabajo no se convierta en fijo, no podrá ser ocupado por ningún otro tipo de contrato en l plazo de dos años.

Soto explicó que esta propuesta pretende ser una aportación de este sindicato a las organizaciones que negocian la reforma del mercado laboral. Dijo que si finalmente no hay acuerdo, algo que calificó de "indeseable", trasladarán su proposición al Gobierno para que la tenga en cuenta en los cambios que se adopten.

La sindicalista criticó la postura "intransigente" mantenida en las negociaciones por la CEOE, de quien dijo que sólo plantea el abaratamiento del despido. Explicó ue este contrato de larga duración sustituiría al resto de las modalidades que no responden a causas muy definidas.

Según la propuesta de USO, el número de contratos debería reducirse a siete: indefinido, de larga duración, de formación, de interinidad, por obra o servicio, por circunstancias de la producción y fijo discontinuo.