"Los sindicactos y los empresarios han pedido al Gobierno, y en general a los que estamos en la vida pública, que no intervengamos en este proceso", recordó.

Asimismo, Arenas aseguró en Santiago que "la sociedad española tiene prisa" por la consecución de un acuerdo entre sindicatosy empresarios para desarrollar la reforma laboral, y afirmó en ese sentido que "las conversaciones no deben demorarse", ya que en su opinión mientras los empresarios no sepan a qué atenerse en materia laboral, se está perjudicando la creación de empleo.

El ministro, que hizo estas declaraciones mientras celebraba en compañía de las Nuevas Generaciones del PP gallego el primer aniversario de la victoria electoral, afirmó que "hace un año nadie pensaba que España entraría en la primera velocidad europea, y destacó los logros obtenidos en reducción de tipos de interés y descenso de la inflación.

Javier Arenas aseguró que "el bloque de medidas económicas aprobadas por el Gobierno ha creado un clima de confianza entre los empresarios". La reducción de la fiscalidad de las pymes y el menor coste energético para las industrias han permitido, señaló el ministro, la creación de 200.000 empleos en 1996. Auguró además un crecimiento sostenido del empleo en 1997.