La Unión de Consumidores de España (UCE) presentó hoy en Sevilla su informe de 1994. Según su secreario general, Jorge Hinojosa, la vivienda sigue siendo el principal motivo de conflicto por parte de los consumidores españoles, seguido de los servicios públicos, las reparaciones, los servicios bancarios, el comercio y los seguros, por este orden.

La sanidad privada alcanzó el mismo nivel de reclamaciones y consultas que la pública, según el informe, en torno a 7.000 denuncias. Por comunidades autónomas, Madrid acumuló el mayor número de quejas con casi 37.000, seguida por Andalucía con casi 28.000,y Valencia con 18.000.

Por el contrario, las comunidades que menos quejas registraron fueron Galicia, con apenas 1.500, Canarias con 3.600 y Baleares con 4.600 denuncias.

"La reclamación es el gran fracaso del mercado. Si en lugar de trabajar por reclamar, se trabajara por prevenir la reclamación, se mejoraría el mercado", afirmó el máximo responsable de la UCE.

A su juicio, la obligación de las asociaciones de consumidores y de las propias empresas es apostar por la calidad de los productosy no por la reclamación que es, a su juicio, la consagración del incumplimiento de la ley.

El control en origen de los productos es cada día inferior en España, aunque aumenta el control en destino. En este sentido, Hinojosa pidió que el mercado español no se convierta en receptor de los productos que no quieren el resto de países europeos.

Según sus datos, fueron presentadas reclamaciones por un valor medio de 50.000 pesetas. "Para 50.000 pesetas no hace falta ir a los tribunales de justicia sin al arbitraje", advirtió. La UCE estima que el 90 por ciento de las reclamaciones presentadas en 1994 fueron resueltas a través de su mediación.