REBAJAS. CONSERVAR EL TICKET DE COMPRA Y NO DEJARSE LLEVAR POR LAS AGLOMERACIONES, CONSEJOS DE LA CECU

MADRID
SERVIMEDIA

No dejarse llevar por las prisas y las aglomeraciones, pedir y conservar un tiempo el ticket de compra, y comprar sólo lo que realmente se necesita, son algunas de las recomendaciones de la Confederación Española de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECU) para comprar en las rebajas, que comienzan mañna en toda España.

Según la CECU, hay que adquirir las prendas habiendo revisado antes la etiquetas informadoras de la composición, la talla y tratamiento a efectos de lavado y planchado. También hay que comprobar que junto al precio rebajado figura el precio antiguo y que el artículo que se compra es actual, así como fijarse bien en las tallas y en las cremalleras, ya que las rebajas deben ofrecer igual calidad a mejor precio.

Cuando se compre electrodomésticos, aunque sea en rebajas, no hay queolvidar que el vendedor está obligado por ley a ofrecer una garantía, y cuando se adquieran productos alimenticios, hay que mirar siempre la fecha de caducidad.

La CECU recomienda también preguntar, antes de pagar, si se pude cambiar la ropa, porque los comercios están obligados a cambiar los artículos cuando sean defectuosos, siempre y cuando no se hayan usado. En este sentido, la organización de consumidores aconseja elegir las tiendas en función de las prestaciones que ofrezcan.

Asimismo, señaan que para reconocer la verdadera rebaja, es conveniente pasarse unos días antes por la tienda para conocer el género. En cuanto a las tarjetas de crédito, hay que saber que aquellos establecimientos que exhiben un cartel en la puerta anunciando que las admiten y ofrecen el servicio durante el resto del año, no pueden negarse a admitirlas en rebajas, ni pedir que el consumidor pague el recargo del banco.

DOS TEMPORADAS DE REBAJAS

La CECU recuerda también que la Ley de Ordenación del Comercio Minorita, que entró en vigor en febrero de 1996, fija dos temporadas de rebajas, una a principios de año, y otra en torno al período estival de vacaciones, con una duración mínima de una semana y máxima de dos meses, dentro de las fechas que establezcan las Comunidades Autónomas.

En este sentido, la organización de consumidores advierte que no hay que confundir los saldos y las liquidaciones con las rebajas.

Los primeros se refieren a productos que han perdido su valor en el mercado, por estar deteriorddos u obsoletos, siempre que no impliquen daño o riesgo para el consumidor. Los productos de saldo deben anunciarse como tales y estar en poder del vendedor al menos seis meses antes de la fecha de comienzo.

La liquidación es una venta de carácter excepcional que se produce por decisión judicial,cese de la actividad, cambio de ramo, local, obra o similar, y tiene como fin dar salida a todos los productos existentes en el local. Los artículos deben estar previamente a la venta y el proceso no puede duar más de seis meses. Este tipo de venta puede ser total o parcial.

Por último, las rebajas significan una reducción del precio por cambio de estación o temporada. Todos los artículos que se vendan como rebaja deben haber estado a la venta con anterioridad en el establecimiento y no pueden estar deteriorados.

(SERVIMEDIA)
06 Ene 1997
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