Hasta el momento hay pocas pistas que puedan llevar a la localización de su paadero y a albergar alguna esperanza sobre si sigue con vida, excepto las declaraciones de algunos testigos que se encontraban en las cercanías del lugar de su desaparición.

Según estos testimonios, la niña podría haber sido raptada por un joven que conducía un Ford Fiesta blanco, en cuya matrícula figuraba la letra "O", según varios testigos de los momentos en que la niña fue vista por última vez.

La policía ha establecido controles en las carreteras de enlace con Asturias y Castilla y León y helcópteros y perros adiestrados de la Guardia Civil y de la Policía Local de Villalba, junto a varias decenas de vecinos de Goiriz y aldeas circundantes colaboran en la búsqueda de la niña.

La madre de María del Carmen Rivas López cree que la hipótesis más probable es que alguien secuestrara a su hija pues, según dijo, la pequeña "no se iba con nadie".