Del total de actuaciones efectuadas, 34 corresponden al control de instalaciones radiactivas y de aparatos de rayos X con fines médicos. También se han revisado tres medios de transporte con sustancias nucleares de procedencia nacional, pero que circulaban por territorio de la Comunidad Valenciana.

La inspección también se ha encargado de medir los niveles de radiación y de realiar el análisis radioquímico de muestras representativas de los campos de exposición en el entorno de la central de Cofrentes.

La Generalitat dispone de una red de alerta con estaciones ubicadas en un radio de 10 kilómetros alrededor de la central, que miden los niveles de contaminación nuclear del aire, radioiodos y radiactividad en aerosoles.