De hecho, la demanda hasta mediados del mes ascendía a 56.562 millones de kilowatios/hora, mientras que la producción ascendía a 54.187 millones en el mismo período, lo que da cuenta del mayor uso que el sistema eléctrico está haciendo de los acuerdos de intercambio en la red de alta tensión con Francia para aender las puntas de demanda.

Sin embargo, la falta de lluvias sigue arrojando un "negro balance" para las instalaciones dedicadas a la producción hidroeléctrica, que desde primeros de año ha caído un 12,7%. Ello está suponiendo un encarecimiento de los costes de operación adicionales que la situación está provocando en las empresas del sector.

Esa carestía se está compensando parcialmente con un crecimiento del 4,5% en la producción eléctrica con instalaciones térmicas clásicas -fuel, carbón y ga-, y del 5,6% en la de origen nuclear.