RSC

RAMÓN JÁUREGUI CENSURA LA FALTA DE ESPIRITU CRÍTICO DE LOS MEDIOS CUANDO INFORMAN DE GRANDES EMPRESAS -En la clausura de un curso de El Escorial sobre el compromiso social de la información

SAN LORENZO DE EL ESCORIAL
SERVIMEDIA

El portavoz del Grupo Socialista en la Subcomisión de RSC del Congreso de los Diputados, Ramón Jáuregui, censuró hoy la falta de espíritu crítico con que los medios de comunicación informan de las empresas, algo que atribuyó a que grandes compañías son propietarias de importantes grupos mediáticos.

"Los medios de comunicación no informan del comportamiento de las empresas, sino de lo que las empresas quieren que se informe" o de lo que éstas "quieren contarles", dijo Jáuregui en la clausura del curso "Necesidades, oportunidades y carencias de la información social. El compromiso social de la información", organizado por la agencia de noticias Servimedia, e impartido esta semana dentro de los Cursos de Verano 2006 El Escorial, de la Universidad Complutense.

En opinión del diputado socialista, "los medios de comunicación son, en gran medida, de las compañías, por lo que las informaciones que salen a la luz no suelen ser críticas".

En este sentido, advirtió de que, "si los ciudadanos no están honradamente informados, puede ocurrir que las sociedades no puedan tomar decisiones de consumo, que premien o no a las empresas que no apliquen políticas de responsabilidad social", lo que se convierte en una de las principales barreras del desarrollo de la RSC.

CUATRO OBSTÁCULOS

Jáuregui puso de manifiesto cuatro obstáculos para la expansión de la cultura de la RSC. En primer lugar, dijo que, a corto plazo, la implementación de las políticas de la responsabilidad social puede suponer un incremento de los costes de las compañías, aunque a medio y largo plazo, a su juicio, "será un elemento de competitividad".

Explicó también que en la actualidad existe mucha confusión conceptual sobre la RSC y "demasiada propaganda semántica", ya que todavía no hay una cultura integral de la RSC en las empresas, sino de reputación corporativa.

Además, destacó la dificultad existente para establecer parámetros homologables para medir la RSC, que "incluye un abanico tan amplio de acciones, que no hay parámetros de medición", y sí ausencia de sistemas homologados de control y verificación.

Como cuarta barrera, el diputado se refirió a las dificultades de la extensión de la RSC a los proveedores en la economía de la externalización.

"El problema es que la RSC se centra demasiado en las grandes compañías, que se sienten obligadas a ofrecer una imagen", explicó Jáuregui, quien continuó diciendo que estas empresas, "a su vez, subcontratan a otras, que si no reciben esta cultura de RSC, no la ejercerán".

En su opinión,"esto es un problema" porque, si no llega la RSC a estas compañías, "acabará siendo una cuestión únicamente corporativa".

Para la superación de todas estas barreras, Jáuregui cree conveniente que haya un organismo de asesoramiento del Gobierno sobre la manera de implementar las políticas de RSC y un departamento, de carácter horizontal, con capacidad de estructurar, gestionar y dirigir la política de RSC.

(SERVIMEDIA)
14 Jul 2006
IGA