Homs, que competía por segunda vez en estos Juegos de Turín, realizó un buen eslalon en una pista de 600 metros en perfectas condiciones para el esquí de alta competición.

El eslalon para discapacitados físicos, tras la disputa de las dos mangas, fue ganado por el austriaco Robert Meusburger que consiguió su primera medalla en estos Juegos. Detrás de él quedó el suizo Thomas Pfyl que ganó la plata, mientras que el bronce se lo llevó el alemán Gerd Schoenfelder, quien completó de esta manera una actuación espectacular en estos Juegos en los que ha ganado dos medallas de oro, una de plata y la de bronce conseguida esta mañana.

Después de efectuar la primera manga, Homs reconoció a los periodistas destacados en Turín que la causa de saltarse la última puerta estuvo en que fue "demasiado al límite". "Si hubiera estado un palmo más lejos lo habría conseguido, pero he visto que no entraba", agregó.

En cuanto al descenso realizado manifestó que al principio del eslalon se movió poco e "iba con problemas" pero entró bien en el último muro hasta que "pasé a caballo la puerta".

Como balance final de su participación en estos Juegos, y tras el 50º puesto obtenido en el gigante, Homs comentó que a nivel de competición "estuvieron aquí los mejores esquiadores del mundo". "Tras pasarme dos años sólo pensando en esto, a nivel de formación personal, de conocer el mundillo y tener buen trato, estoy muy feliz", señaló.

De cara al futuro, estos Juegos "me hicieron ver donde estoy" aunque a partir de ahora el problema "es el dinero". En este sentido manifestó que tiene que ver "como combinar el trabajo con el entrenamiento" aunque aseguró que el esquí no lo va a dejar porque le gusta y pondrá todo para "continuar mi carrera en este mundillo", dijo.

Ramón Homs fue uno de los esquiadores españoles que mayor apoyo tuvo desde la grada ya que toda su familia y algunos amigos "cogieron vacaciones" para ver el debut del catalán en unos Juegos Paralímpicos.

Así se puso el punto final a la competición para discapacitados físicos en los IX Juegos Paralímpicos de Invierno, en la que la delegación española estuvo representada por Eduardo Carrera y Ramón Homs, quienes quedaron lejos de la lucha por las medallas.

Carrera sólo pudo competir en el descenso y el supergigante y tuvo que abandonar los Juegos Paralímpicos tras sufrir una subluxación en el hombro que se produjo durante el entrenamiento que efectuó en el día de descanso (miércoles).

El esquiador gerundense, que esperaba obtener una buena clasificación en el gigante que no pudo disputar, consiguió el puesto 34 en la prueba que abrió el Esquí Alpino (descenso), mientras que en el supergigante obtuvo la posición 41.