Rajoy se expresó así durante su primera intervención a puerta cerrada ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP, reunido en Madrid en plena crisis interna del partido para aprobar los últimos detalles de la organización del cónclave.

Según informaron a Servimedia fuentes populares, Rajoy anunció un cambio en la "agenda política" del Partido Popular para centrar la labor de oposición en los asuntos que más interesan a los ciudadanos, como la situación de la economía y el aumento del paro.

Rajoy hizo una comparativa entre la situación actual de España y la que se vivía en 2004, tras su primera derrota electoral. Por eso, pidió trabajar para incrementar el número de votos del 9-M porque los 10,4 millones de sufragios recibidos ese día "no son suficientes para ganar" al PSOE.

Además, Rajoy aprovechó la última reunión del Comité Ejecutivo Nacional antes del Congreso de junio para agradecer la labor realizada durante los últimos cuatro años y destacar en particular el papel de Ángel Acebes como secretario general.

"Nunca lo voy a olvidar", dijo sobre Acebes, quien hace más de un mes ya anunció públicamente que no repetirá en el puesto. Su sustituto podría ser el portavoz en el Senado, Pío García-Escudero, según indicaron a Servimedia dirigentes nacionales a los que Rajoy ha consultado su decisión.

Rajoy también elogió el "debate muy interesante" que se está produciendo en vísperas del Congreso con las ponencias y las correspondientes enmiendas.

La reunión, que dura ya más de tres horas, ha contado con intervenciones de numerosos dirigentes como Juan Costa, que admitió que se está planteado presentar una candidatura alternativa a la de Rajoy y reclamó crear "ilusión".

Costa salió también en defensa de su mujer, socia de la empresa que está participando en la organización del Congreso de Nacional, y pidió que se abra una investigación interna para conocer quién ha filtrado su dedicación.

Por su parte, el eurodiputado Alejo Vidal-Quadras manifestó su apoyo a Mariano Rajoy, pero criticó duramente la ponencia política. Mucho más crítico fue el diputado Carlos Aragonés, quien se posicionó en contra de lo que está haciendo la dirección nacional.

El presidente del PP de Andalucía, Javier Arenas, apoyó sin complejos la candidatura de Mariano Rajoy, mientras que el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, leyó de un papel una retahíla de reproches a la actual dirección.

Entre otras personas, también tomaron la palabra el ex ministro Federico Trillo; el presidente fundador del PP, Manuel Fraga; la portavoz en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría; y la ex ministra Celia Villalobos.