En una entrevista que hoy publica el diario "ABC", Rajoy sostiene que la iniciativa del jefe del Ejecutivo vasco "no es más que un gravísimo desafío", porque pretende negociar "de igual a igual con el Gobierno de España, la parte con el todo".

El segundo elemento de gravedad radica, según el líder de los populares, en que "aquí lo único que se pretende es someter a referéndum un plan unilateral, independientemente de lo que diga el Estado o las Cortes Generales, porque entiende que es soberano para hacerlo. Es un desafío de colosales proporciones y no darse cuenta de que eso es así me parece una frivolidad que me preocupa".

Sobre posibles respuestas, el líder de los populares explica que ha pedido al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, una reunión para fijar "una posición conjunta" y explicar a los españoles que Gobierno y oposición "no están dispuestos a que se incumpla la ley y que esta tropelía salga adelante".

A este respecto, Rajoy destaca que la respuesta inmediata debe ser recurrir el plan al Tribunal Constitucional, porque la misma aprobación de la propuesta en el Parlamento vasco ya produce "efectos jurídicos".

Este recurso debe ir seguido, a su juicio, de "una respuesta serena, firme y democrática, sin ambigüedades y sin posibilidad de interpretaciones confusas, porque el tema, sin lugar a dudas, es crucial". A su juicio, debe trasladarse a los españoles "que se va a hacer cumplir la ley y que, desde luego, el Estado de derecho será respetado".

Al mismo tiempo, el presidente del PP lamentó que la existencia de un "Gobierno débil e inestable" hace que su presidente no pueda estar defendiendo en esta situación "lo que siempre ha defendido el PSOE: ser un partido español".