Rajoy recordó que el IRA hizo en Irlanda del Norte una entrega de las armas que no fue pública, y consideró que "quizá un acto de entrega de las armas le dé más visibilidad a esa decisión irreversible de dejar las armas".

En el curso de una entrevista en Rne, el líder del PP indicó, respecto a un posible acercamiento de presos a cárceles vascas, que "no hay que hacer absolutamente nada hoy" y "es un tema del que ni siquiera deberíamos estar hablando".

Tras reiterar su "pleno apoyo" al jefe del Gobierno para acabar con la banda terrorista, agregó que ve un exceso de "entusiasmo" que lleva a dedicar elogios a un condenado por terrorismo como Arnaldo Otegi.

"Hay que situar las cosas en sus justos términos y noolvidemos quiénes han sido las víctimas. El señor Otegi es líder de una organizacion terrorista y eso es bueno recordarlo para no caer en voluntarismos absurdos", insistió.

CARTAS DE EXTORSIÓN

También se refirió a la polémica suscitada ayer por el hecho de que el presidente del Gobierno anunciara en una radio, antes que al propio Rajoy por teléfono, que el segundo informe de verificación del alto el fuego confirma el cese total de actividades terroristas.

Al presidente del PP le parece "un poco absurdo" que Zapatero diga eso y, por la tarde, el presidente de la patronal navarra advierta de que siguen llegando cartas de extorsión. "¿Tanto le cuesta al Gobierno llamar al presidente de la patronal de Navarra y decirle: oiga por qué usted dice esto?", indicó.

Mariano Rajoy no acepta que en el País Vasco haya "un proceso de paz", porque no hay una guerra. "Estamos ante un problema de libertad de los amenazados (...) Estamos ante la necesidad de que un grupo terrorista deje a los demás y vuelva la libertad. No hay que hablar de política ni modificar estatuto", dijo.

El líder del PP se opuso frontalmente a ceder más competencias al País Vasco en una reforma del Estatuto de Gernika, porque es la autonomía con más autogobierno del mundo. "No hay ningún lugar en el mundo donde haya esa descentralización", señaló.

Por otro lado, dedicó duras palabras al sacerdote norirlandés Alec Reid y dijo que "la credibilidad que me merece es ninguna". "Este señor es un conocido amigo de Batasuna. Vino a Madrid a dar una conferencia. Yo lo que le he dicho al presidente del Gobierno es: constata el fin de ETA, hazlo como quieras, pero desde luego yo no aceptaré nunca ningún mediador internacional, porque aquí no hay conflicto entre pueblos ni entre estados (...) Este es un asunto que atañe a los partidos y a las Cortes Generales".