Rajoy denunció en rueda de prensa que el Ayuntamiento de Sevilla ha dado "dinero a cambio de facturas falsas" a una empresa propiedad de un militante socialista que está relacionado con Juan Guerra, hermano del ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra.

Asimismo, apuntó que el alcalde del municipio sevillano de Sanlúcar la Mayor, antiguo jefe de escoltas de Manuel Chaves, ha facilitado el enriquecimiento de dos sobrinos de Felipe González en una operación urbanística.

El líder del PP resaltó que los escándalos de corrupción habían desaparecido "durante ocho años" de los problemas que más preocupaban a los españoles y lamentó que "ha pasado poco tiempo" desde la llegada del PSOE al Gobierno para que vuelva a hablarse de este tipo de escándalos.

"No ha transcurrido ni un año y ya tenemos que hablar de pelotazos, de facturas falsas y de corrupción", apostilló el presidente del PP.

Añadió que el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, debería dar órdenes a la Fiscalía Anticorrupción para que investigue ambos casos, al igual que hizo recientemente en Majadahonda (Madrid), donde los presuntos implicados son del PP.

Rajoy se amparó en el "principio de igualdad" para reclamar una investigación de la Fiscalía en los dos casos andaluces y confió en que Conde-Pumpido demuestre la "misma diligencia" que en el de la localidad madrileña gobernada por el PP.

El líder del PP no descartó denunciar estos hechos en los tribunales y adelantó que el Partido Popular de Andalucía pedirá la dimisión de los alcaldes de Sevilla y Sanlúcar la Mayor.

El presidente del PP sacó a relucir este asunto después de que el líder del PP de Andalucía, Javier Arenas, expusiera estos mismos datos en la reunión de maitines mantenida por los hombres de mayor confianza de Rajoy.