Rajoy abrió con estas palabras el curso político durante su intervención en un acto celebrado en la localidad pontevedresa de Ribadumia con cargos públicos del Partido Popular de Galicia.

Según dijo, nadie del Gobierno se ha puesto en contacto con él para comunicarle que Zapatero tiene la intención de convocarle a La Moncloa, sino que se ha enterado "por la prensa".

Rajoy aceptó acudir a la cita, pero advirtió de que no está dispuesto "a ser una coartada para sus desaguisados" ni "a que se sustituya el medio por el fin" y que lo verdaderamente importante de la reunión acabe siendo el mero hecho de que ambos dirigentes se sienten en un mismo sillón.

A su juicio, Zapatero tiene que fijar posición y criterio sobre multitud de temas: las perspectivas económicas, la reforma de los estatutos, el "caso Roquetas", los numerosos incendios de este verano y la nueva ley educativa.

Rajoy recordó que fue el secretario general del PSOE quien abrió el debate de las reformas estatutarias nada más ganar las elecciones generales, por lo que considera que ahora "no puede callarse" ante el cruce de declaraciones entre dirigentes socialistas.

UN PAIS VASCO EN "ESTADO DE INSUMISION"

Asimismo, calificó la situación que atraviesa el País Vasco de "estado de insumisión" tras el protagonismo que ha acaparado Batasuna por las manifestaciones de San Sebastián y Bilbao.

Recordó que todo esto se produce después de que Zapatero "rompiera" el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo y de que aprobara en el Parlamento una moción a favor de la negociación con ETA, siempre que la banda deje las armas.

También reclamó que el presidente del Gobierno dé explicaciones en las Cortes sobre la continuidad del director general de la Guardia Civil, tras la muerte de un agricultor en el cuartel almeriense de Roquetas de Mar.

Rajoy tachó de "desastre" la política antiincendios del Ejecutivo pese a la aprobación de dos planes antes del verano y exigió que la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aclare en el Congreso por qué dijo que hay colaboración social con los pirómanos en Galicia.

El líder de los populares adelantó que las políticas educativa y económica serán dos prioridades para el principal partido de la oposición durante los próximos meses, hasta el punto de estar dispuesto a "dar la batalla" para que haya una educación de calidad.

CONVENCION NACIONAL DEL PP EN FEBRERO

En clave interna, el presidente del PP anunció la celebración de una gran Convención Nacional en el mes de febrero, tal y como establecen los estatutos del partido. El objetivo, según dijo, es construir un "nuevo proyecto político".

Rajoy explicó que la Convención Nacional servirá para "reafirmar los principios" de esta formación, "adelantar el futuro" y "pensar en lo que puede ser España en los próximos 20 años".

Finalmente, hizo un llamamiento a los cargos públicos del PP para que en los próximos meses se dediquen a "trabajar, pensar y decidir" sobre lo que debe hacer el partido con vistas a las elecciones generales previstas para 2008.

Rajoy, que dijo sentirse "orgulloso" de pertenecer al Partido Popular de Galicia, también lanzó un mensaje de tranquilidad a sus dirigentes ante el congreso ordinario en el que se elegirá al sucesor de Manuel Fraga.