QUINCE DETENIDOS Y DOS HERIDOS EN EL DESALOJO DE 117 "OKUPAS" EN UN INMUEBL DE MADRID

MADRID
SERVIMEDIA

El desalojo policial de los 117 'okupas' que vivían en un edificio de la Ronda de Toledo, en el popular barrio madrileño de Embajadores, se saldó esta mañana con quince detenidos y dos heridos, un 'okupa' y un policía.

Los enfrentamientos se prolongaron durante tres horas, desde las nueve de la mañana a las 12 del mediodía, e inmediatamente después se procedió a derribar el edificio, un antiguo centro social actualmente en ruinas, en el que los"okupas" vvían desde hace cinco años.

Como consecuencia de la acción policial, uno de los 'okupas' fue ingresado en el Hospital Doce de Octubre, con una contusión en la cabeza, según la versión facilitada por un funcionario del Servicio Municipal de Urgencias (Samur).

Asimismo, un policía tuvo que ser atendido en el centro sanitario Gregorio Marañón, con una herida en una de las piernas, y otros tres agentes precisaron asistencia médica por cortes en las manos, a causa de los cristales.

Ninguno de losdetenidos es un 'okupa' sino amigos y vecinos que mostraba su apoyo a los desalojados y que protagonizaron enfrentamientos con la policía. Todos ellos pasarán a disposición judicial, según fuentes policiales.

Un testigo presencial relató que los 'okupas' estaban "tranquilamente esperando a que llegara la policía" que entró "gritando commo salvajes, como aninales y a lo bestia", mientras que los desalojados adoptaron una actitud pacífica.

Varios 'okupas' señalaron que, mientras iban saliendo del eificio, recibieron "unas hostias impresionantes, y porrazos en la cabeza".

La policía, que usó pelotas de goma, perros y martillos para derribar las puertas, aseguró que la actuación fue "correcta" por parte de los 125 agentes que participaron en el desalojo, de los cuales cien eran efectivos antidisturbios y el resto de la policía municipal, guardias de tráfico, ambulancias Samur y un helicóptero.

"¡QUE BUSQUEN A ROLDAN Y NOS DEJEN EN PAZ!"

Cada vez que un grupo de 'okupas' salía del edificio on las manos en la cabeza y rodeados de policías, un grupo de vecinos y compañeros coraban, desde la acera de enfrente, lemas como "¡que busquen a Roldán y nos dejen en paz!", "la represión no es solución" y "más viviendas y menos policías".

Asimismo, cuando los agentes se asomaban a los balcones para indicar que las habitaciones habían quedado vacías o para sacar algún mueble o cacharro, dicho grupo coraba "¡que se tiren!" y alguno más airado añadía "¡y de cabeza!".

Uno de los abogados de los 'oupas', Francisco Garcia Cedier, que calificó el desalojo de "absolutamente impresentable", indicó que la policia no les dejó entrar a ver sus clientes alegando que "no podían garantizar" su seguridad.

García Cedier señaló que el desalojo es consecuencia de una causa judicial en la que estaban demandadas 18 personas, y que, a su juicio, debió respetarse al resto de los ocupantes del inmueble.

Consideró una lástima que se cierre el centro social Minuesa, cuando es un grupo que se "autogestiona solo y cuando el Ayuntamiento no crea unos nuevos y "hecha a la gente" que da alternativas.

Los 'okupas', que vivían en el edificio desde noviembre de 1988, indicaron que en ningún momento habian opuesto resistencia activa, sino "pasiva" y tranquila, señalaron que, a partir de ahora, "sin casa nos hemos quedado, está claro, y en algún lado nos tendremos que meter".

Por último, indicaron que mientras los alquileres contínuen siendo innacesibles para los jóvenes y se sigan especualando con las vivienda, "seguiremos okupando".

(SERVIMEDIA)
18 Mayo 1994
VBR