El doctor Bernard Cole, de la Escuela de Medicina Darmouth, en Lebanon (Estados Unidos), ha presentado los datos de 47 estudios realizados a más de 18.000 mujeres sobre los beneficios que pdía aportar la quimioterapia en la lucha contra el cáncer de mama.

Para ello, los investigadores utilizaron un método estadístico, Q-TwiST, que determinaba la calidad de vida de la paciente ajustada al tiempo que ésta permanecía sin síntomas de la enfermedad.

Con este método, se comparó, durante diez años, la situación de aquellas mujeres que habían recibido la quimioterapia y las que no se habían sometido a ella. En el caso de las primeras, se comprobó que ganaron una media de 10,3 meses libres e recaída y 5,4 meses de supervivencia total en el tiempo que duraron los estudios.

En las mujeres mayores de 50 que se sometieron al tratamiento con quimioterapia, el beneficio, aunque fue menor que en las mujeres jóvenes, también fue importante, ya que experimentaron una mejora considerable. Así, el tiempo sin recaída fue de 6,8 meses y el tiempo total de supervivencia, 2,9 meses.

Según los autores del estudio, los efectos positivos que se derivan del uso de la quimioterapia adyuvante son más nmerosos e importantes que los efectos secundarios tóxicos.

La quimioterapia recibe el nombre de adyuvante cuando se usa tras el tratamiento quirúrgico loco-regional y no existe evidencia de enfermedad. La razón de su utilización es la posible existencia de micrometástasis en el momento del diagnóstico. Si no se administra un tratamiento sistémico, esta mínima enfermedad a a la larga conducirá a la futura recaída de la paciente.