En una nota de prensa, la UCE tacha de "incomprensible" que el dictamen de la CE se limite a recomendar a los países de la UE que tomen medidas encaminadas a asegurar un altonivel de protección a los niños y, a su vez, admita que los juguetes y objetos de puericultura para menores de 3 años fabricados con PVC blando pueden producir efectos nefastos para la salud.

Además, la UCE ha remitido una comunicación al Ministerio de Sanidad y Consumo para que ponga en marcha los mecanismos necesarios para elaborar una norma sobre etiquetado que obligue a declarar la presencia de PVC y de ftalatos en los productos.

A su juicio, el consumidor tiene derecho a conocer el origen, nturaleza, composición y finalidad de los bienes, productos y servicios, máxime cuando hay un pronunciamiento claro sobre la nocividad de ciertos productos como son los ftalatos, utilizados para dar flexibilidad e intensificar los colores.