Fuentes de Instituciones Penitenciarias informaron a Servimedia de que los funcionarios de la cárcel de A Lama colocaron y activaron la pulsera de control con la que Maximino Couto abandonó la cárcel.

Las fuentes consultadas explicaron que la pulsera estaba activada cuando el recluso fue detenido tras asesinar a su novia, con la que vivía en la aldea de Tourón (Ponte Caldelas).

Sin embargo, el Ministerio del Interior, del que dependen las cárceles, investiga por qué la pulsera no dio la señal de alarma cuando Maximino Couto, tras asesinar a su novia con un cuchillo, se desplazó a otra aldea para intentar acabar con la vida de su ex mujer.

La pulsera del recluso estaba programada, en teoría, para que no se pudiera acercar a menos de dos kilómetros de su ex mujer, ya que de hacerlo saltaría la alarma. Este fallo es el que se está investigando.

Esto hizo que el preso, tras no localizar a su ex mujer en el antiguo domicilio del matrimonio, agrediera a dos vecinos que vivían en el mismo inmueble que la ex esposa. Estos vecinos, que resultaron gravemente heridos, testificaron contra Maximino Couso en el juicio por malos tratos al que este fue sometido y por el que ingresó en prisión.