Para ello, el propio Pujol y varios de sus consejeros mantendrán reuniones con el ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, quien en una carta enviada hace unas pocas semanas a la Generalitat se mostraba reacio a abordar nuevos traspasos.

No obstante, el presidente catalán considera que la entrevista con Aznar resultó satisfactoria y resaltó que en ningún caso sus peticiones pueden poner en peligro la colaboración entre el Gobiernoy CiU para preservar la gobernabilidad.

Ambos dirigentes discutieron el calendario de infraestructuras que la Generalitat quiere que el Estado aborde en Cataluña. Pujol se mostró confiado en que algunas de las obras fundamentales que pretende llevar adelante en Cataluña, como el desvío del río Llobregat o la construcción de la tercera vía del aeropuerto de Barcelona puedan abordarse antes de fin de año.

Por lo que se refiere al tren de alta velocidad entre Madrid y Barcelona, se mantienen los plaos para su ejecución, que está previsto que concluya en el año 2004.

(SEGUIRA AMPLIACION)