"Cataluña no pretende la secesión. Nosotros aspiramos a un estatus semejante al que tiene ahora la provincia de Quebec (Canadá), de reconocimiento de personalidad diferenciada, no a la secesión", afirmó Pujol en una entrevista concedida a "La Vanguardia".

En este sentido, se mostró contario al sistema federal, ya que, en su opiión, "el federalismo responde a un criterio homogeneizador" que propone 'el café para todos' con el que, según Pujol, "hay que acabar" mediante un debate a fondo de cómo está organizado el sistema autonómico en España.

A juicio del máximo dirigente de CiU, Cataluña, para quien pidió un "trato distinto porque es diferente", y Euskadi son dos realidades colectivas dentro de España, de las que dijo que tienen una "personalidad muy fuerte, más fuerte incluso que la de varios estados europeos".

SITUACIONDE LAS NEGOCIACIONES

Con respecto a la actual situación de las negociaciones entre CiU y PP, Pujol aseguró que, en estos momentos, "no está bien el primer cohete" de la investidura. "Sin este primer cohete ya no hay este segundo (el de la discusión del presupuesto del 97), ni tercero (el de la estabilidad)".

Pujol confirmó que los acuerdos pueden ser "relativamente rápidos" en materia económica y europea. Sin embargo, en materia autonómica, ámbito que para Pujol "ahora es prioritario", el lider d CiU pidió más tiempo para alcanzar el acuerdo.

El dirigente nacionalista aseguró que las negociaciones con el PP "son más difíciles" que las que mantuvó con el PSOE en 1993, por el clima de enfrentamiento que mantuvieron con los populares a lo largo de la última legislatura.

Asimismo, se mostró convencido de que, en caso de llegar a un acuerdo en este "momento histórico", se podría "normalizar definitivamente la vida política española". Además, Pujol criticó a quienes no aceptan que un partido ncionalista como CiU pueda convertirse en el partido bisagra de la vida política española.