El histórico dirigente de CiU dice que Cataluña necesita un "gobierno con liderazgo claro y fuerte, un gobierno serio y estricto, y por lo tanto, respetado, y sobre todo que tengan sentido de país". Acto seguido, añade que CiU es quien "mejor garantiza" estos objetivos.

En clave electoral, Pujol señala que los sondeos para CiU "deberían de ir mejor" porque necesita un "resultado claro" para gobernar en solitario.

Agregó que en Cataluña hay tres bloques como mínimo con capacidades para gobernar, pero que "no hay bloque CiU-PP, con el PP no se puede pactar, porque ha provocado una fractura muy profunda que no es solamente política, sino moral".

En este sentido, Jordi Pujol señala que el PP ha provocado una ruptura con CiU y con Cataluña, por lo tanto, añade, "pactar con el PP es política y moralmente imposible. Eso de entrada, y además es probable que al PP le convenga la reedición del tripartito (PSC-IU-ICV y ERC)".

En materia de inmigración, Pujol indica que no le parece "correcta" la actitud mostrada por los países de la Unión Europea. Reconoce que "no tienen razón, aunque resulta comprensible porque en España y más todavía en Cataluña el fenómeno de la inmigración se ha tratado con una gran frivolidad".

A su juicio, el Gobierno de España ha actuado "de forma precipitada e incluso a veces petulante, dando lecciones al resto del mundo". Sin embargo, subraya que "en inmigración algunos alcaldes del PSC adoptaron posiciones responsables", en alusión a José Montilla, cuando ostentaba la alcaldía de la localidad barcelonesa de Cornellá.