PUJOL GARANTIZA A AZNAR UN APOYO A PRUEBA DE TURBULENCIAS ELECTORALES PARA AGOTAR LA LEGISLATURA

- El presidente de la Generalitat desmiente que vaya a actuar como mediador entre el PNV y el Gobierno

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de la Generalitat de Catalunya, Jordi Pujol, garantizó hoy al presidente del Gobierno, José María Aznar, la continuidad de su apoyo hasta el final de la legislatura pese a las dificultades que pueden surgir durante el período preelectoral.

Aznr y Pujol coincidieron en valorar muy positivamente los resultados de su cooperación en estos tres años de legislatura y se expresaron mutuamente su voluntad de continuar en la misma linea en los próximos meses, según dijo el dirigente catalán tras la reunión que ambos mantuvieron en La Moncloa por espacio de dos horas y media.

Su objetivo es mantener la línea de actuación política que hasta ahora ha dado buenos resultados y que debe ser "continuada" y no "espasmódica" para permitir el cumplimiento delos objetivos de convergencia con Europa.

Pese a esta clara voluntad de colaboración política, Pujol dijo que de la reunión de hoy no se puede deducir la existencia de "un acuerdo formal y definitivo" sobre la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para el año 2000, aunque expresó su "predisposición favorable" al consenso a la espera de conocer con detalle a propuesta del Gobierno en el mes de junio.

Uno y otro insistieron en su voluntad de agotar las respectivas legislaturas y, por anto, de convocar elecciones catalanas en otoño de este año y generales en la primavera del año próximo.

Jordi Pujol alertó, sin embargo, sobre la posibilidad de que se produzcan desencuentros en esta etapa cercana a las elecciones. Reconoció que las relaciones pueden ser "más difíciles" y que algunos de los "hechos positivos de esta legislatura pueden estropearse".

El portavoz del Gobierno, Josep Piqué, admitió también esta posibilidad, pero con el convencimiento de que no habrá discrepancias "d fondo", sino más bien conflictos puntuales destinados a acentuar la diferenciación de mensajes en los momentos previos a las elecciones.

MEDIACION

Aznar y Pujol hablaron también de la situación en el País Vasco. El líder de CiU desmintió tajantemente que "nadie" haya solicitado su mediación para suavizar las relaciones entre el Ejecutivo y el PNV, e insistió en que ésa es una función para la que no tiene "vocación" y que resulta innecesaria, puesto que las relaciones entre el Gobierno central y el asco existen.

Piqué también insistió en que Pujol no ha sido solicitado para realizar esa tarea y calificó de "especulaciones sin la menor base" las informaciones aparecidas al respecto.

Por su parte, el presidente de la Generalitat pidió "comprensión" para la posición del Gobierno en el proceso de paz, al igual que solicitó ayer en Barcelona para la posición nacionalista tras su reunión con el lehendakari vasco, Juan José Ibarretxe.

Recurrió de nuevo al símil del coche que circula a 200 kilmetros por hora y que, por tanto, no puede frenar en 25 metros. Explicó que el proceso de pacificación será largo y difícil y que en el espacio que dure la frenada puede producirse alguna "desgracia" o que el vehículo se "salga de la carretera" y esa situación es complicada tanto para "los que van en el coche como para los que intentan frenarlo".

Por estas razones se negó ha hacer una valoración de la actuación del Ejecutivo y de los nacionalistas al tiempo que ofreció "comprensión y respeto" por el poceso y su "apoyo moral y político" para crear el ambiente más favorable a la consecución de la paz.

Sobre la posibilidad de que CiU acabe alineándose con el PNV en esta materia, Piqué dijo que el respeto de Pujol y de la formación política que representa a la Constitución y a las instituciones está fuera de toda duda. "No hay ningún elemento de riesgo que pueda generar inquietud" en los ciudadanos en este sentido, aseguró Piqué.

En esta reunión Pujol no ha planteado a Aznar ninguna reivindicació sobre la financiación autonómica o sobre el techo competecial de Catalunya puesto que considera que estos temas deben discutirse en la próxima legislatura. Ambos dirigentes han acordado verse en el plazo de dos meses.

(SERVIMEDIA)
16 Feb 1999
SGR