Pujol aseguró qu la recuperación ya ha comenzado, "aunque no sea perceptible en la calle", y pidió tanto a Aznar como a Cuevas que no den "una visión catastrofista" de la situación económica porque, "si asustamos a la gente, a lo mejor no llega la inversión".

El presidente del Gobierno catalán insistió en que no desea polemizar respecto a las manifestaciones de los presidentes del Partido Popular (PP) y de la patronal CEOE para no enturbiar el clima económico y recomendó "no estropear la situación con nuestras querelas".

Asimismo, defendió el nuevo Plan de Convergencia con Europa aprobado por el Gobierno central y calificó el proyecto de "prudente" porque propone medidas que "se pueden conseguir" en contraste con el primer plan, del que dijo que era "irrealista".

Pujol también desmintió que tenga previsto remodelar su Gobierno autonómico "ni ahora ni después del verano", después de que algunas informaciones apuntaban la posibilidad de que preparara la sustitución de cuatro consejeros, entre ellos los de Econmía, Macià Alavedra, y de Gobernación, Maria Eugnia Cuenca.

La gestión de ambos ha sido criticada durante los últimos días unánimemente por la oposición por la política de concesión de avales y por los planes de prevención y extinción de incendios forestales, respectivamente.