El autor ofrece una breve explicación de cada una de las palabras que a lo largo de la historia se ha utilizado y se emplean en la actualidad para hacer referencia a las partes íntimas de las mujeres.

Los lectores podrán saber qué sinónimo de la palabra "coño" era el más utilizado en un determinado periodo y cuál era el preferido de algunas de las grandes figuras de la literatura, desde Quevedo hasta la literatura actual.

Los lectores más curiosos también podrán averigurar el origen de cientos de estas palabras y las regiones españolas donde se utilizan con más frecuencia, todo ello recogido en n libro que no llega a las 200 páginas.

Según la editorial, la idea que anima este diccionario está avalada por sexólogos y psicólogos modernos, aunque en realidad es tan vieja como el mundo.

"Ponerle un nombre a esas partes se ha convertido, a lo largo de la historia, en el ejercicio máximo de la metáfora. Cualquier similitud nos vale: si atendemos a la función, el coño es una cerradura; los sentidos nos hacen pensar en almejas, castañas o alcachofas. Será cueva según la luz y la forma, flor segn se abra, pero ¿qué decir del brasero, el higo -sugerente como pocos- o el atrevido cáliz?".

Con este texto Ediciones B promociona "Los mil y un nombres del coño", diccionario en el que "el más querido de todos los nombres será siempre el que aquí no consta, el privado, el mil uno, el que cada cual adjudica al miembro de la pareja o al propio".