Gómez reconoció que el proceso judicial contra los antiguos responsables de la cooperativa y su gestora IGS, que llevó a la cárcel a Carlos Sotos, puede influir en la salida de la crisis de PSV, aunque aseguró que no impeirá el proceso de separación de las promociones.

Esta separación es, a su juicio, "la mejor garantía" para la construcción de las viviendas, ya que las diferentes promociones recibirán todos los activos que les correspondan (suelos y licencias, entre otros) y a partir de entonces se podrán solicitar los créditos hipotecarios necesarios para el reinicio de las obras.

La semana que viene se firmarán la separación de las primeras ocho promociones que se acogen a este proceso, la mayoría de fuera de adrid (Santiago de Compostela, Sevilla, Melilla, Valladolid) al ser promociones más pequeñas. No obstante, de la capital están casi cerrada la separación de Alcobendas, San Sebastián de los Reyes, Orcasitas y Navalcarnero.

El administrador de PSV y presidente de IGS dijo que en la mayoría de estos casos IGS se mantendrá como gestora de las nuevas cooperativas, ya que a éstas les es más rentable, al haber pagado parte de la gestión.

No obstante, Valeriano Gómez matizó que ahora IGS estará sujeta amás limitaciones que anteriomermente, ya que no podrá disponer del crédito hipotecario de la promoción, y solamente cobrará por gestión cuando se hayan conseguido una serie de objetivos.

El plazo para que comiencen las obras una vez que se haya establecido la separación es de un mes, tiempo necesario para solicitar el crédito hipotecario y cerrar las conversaciones con las constructoras. Como agosto es un mes inhábil para este asunto, según Gómez, las obras de las primeras promociones comenzarán en setiembre.

En la próxima semana sliberar los activos y sociedades que no tienen restricciones