Caldera aseguró en rueda de prensa que la "actitud genuflexa con aire de obsequiosidad" adoptada por Piqué al recibir a Bush es "impropia" de un ministro de Exteriores, y le invitó a repetirla "ante el Estado de Derecho cuando sea llamado a declarar por su responsabilidad en el caso Ercros".

El dirigente socialista recordó que Piqué es el único ex alto responsable de Ercros que aún no ha declarado ante la Justicia y consideró que, ante los indicios de comisión de delitos, el ministro debe explicr su participación en los hechos. Para ello, agregó, "el Gobierno debe impedir que el fiscal general proteja de nuevo al señor Piqué".

En definitiva, Caldera exigió al Ejecutivo "que deje de meter las manos en la Fiscalía", no sólo en lo relacionado con Piqué, sino también ante las denuncias del fiscal Anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo.

En este sentido, la Mesa del Congreso dejó hoy aparcadas hasta la próxima semana las peticiones para que comparezcan en la Cámara el fiscal general del Estdo, Jesús Cardenal, y el propio Jiménez Villarejo.

La mayoría parlamentaria representada en el órgano de Gobierno de la Cámara alegó que estas solicitudes entraron en el Registro el pasado lunes, y la Mesa sólo está obligada a calificar cada martes los escritos registrados hasta el mediodía del sábado anterior, por lo que los dejó pendientes para la próxima reunión.

Caldera, sin explicar esta argumentación, se mostró convencido de que el aplazamiento concluirá con una negativa de la Mesa a tramitr estas solicitudes, y reiteró la necesidad de desvelar "las contínuas trágalas, los sistemáticos impedimentos y los inadmisibles controles" a los que está siendo sometido, afirmó, el fiscal Anticorrupción.

Para el portavoz socialista, comportamientos como el rechazo a firmar el convenio del Consejo de Europa contra la corrupción impiden que se cumplan los objetivos perseguidos con el acuerdo suscrito entre PP y PSOE para reformar la Justicia.