López Garrido manifestó en los pasillos de la Cámara Baja su rechazo a la solicitud de comparecencia hecha por el Partido Popular, al entender que el propio Rubalcaba "ya ha aclarado completamente que jamás ha habido una falsificación de documentos por parte del Ministerio del Interior".

"El PP tiene que reflexionar a fondo sobre una estrategia que le está alejando de un núcleo de electores que nunca van a aceptar que se deslegitimen las instituciones democráticas y el Estado de Derecho, ni que se ponga en cuestión la labor de jueces, fiscales y policias en el atentado más trágico de la historia de la democracia", dijo.

López Garrido advirtió a los populares de que su insistencia en seguir investigando los atentados del 11-M "sólo le conduce al aislamiento político y parlamentario y a la división interna".

A modo de ejemplo, resaltó que algunos dirigentes del PP como Josep Piqué o Alberto Ruiz-Gallardón han asegurado que la masacre de Madrid no puede convertirse en el eje principal de la labor de oposición.

Asimismo, acusó al portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, de querer llevar a la sede de la soberanía nacional "la confusión, el enredo, la puesta en cuestión del Estado de Derecho" e insistió en que el resto de los grupos no piensan tolerar "que el Parlamento se envenene con una estrategia de deslegitimación de las instituciones".