Nada más terminar el debate organizado por la Academia de Televisión en el Recinto Ferial Ifema, fuentes socialistas aseguraron que Zapatero había ganado el debate "de largo" gracias a un "discurso sólido" en el que había desmontado una por una las críticas de Rajoy.

El PSOE considera que Zapatero ha sabido imponerse "frente a un Rajoy demagogo" que recurrió a dos asuntos delicados, como el terrorismo y la inmigración, para tratar de erosionar al presidente del Gobierno.

A la vista del debate, las mismas fuentes socialistas concluyeron que Rajoy dejó en evidencia en cada una de sus intervenciones que "sólo saber ser líder de la oposición" porque se apoya en un discurso "insolvente" basado sólo en el terrorismo y la inmigración.

En el PSOE creen que Rajoy volvió a pintar "una España en negro" alejada de lo que siente la mayoría de los ciudadanos, pasando "de puntillas" por los problemas reales, utilizando la lucha contra el terrorismo como arma electoral y "rematando el desastre al reconocer que no sabe lo que es un bonobús".

Por su parte, fuentes populares sentenciaron que Rajoy ganó "con contundencia" a Zapatero, ya que el candidato socialista "sólo habló de pasado" mientras que el líder del PP atendía "los problemas de los españoles".

En el PP tuvieron la sensación de que Zapatero se refugió durante todo el debate "en grandes cifras" para negar la delicada situación de muchas familias españolas, que en los últimos meses han visto aumentar los precios y las hipotecas mientras que perdían poder adquisitivo.

Asimismo, estas fuentes populares criticaron que Zapatero "no ha querido hablar de inmigración ni de precios ni de los problemas económicos" de los españoles, lo que, en su opinión, le llevó a comparar el número de muertos en la lucha antiterrorista al verse "acorralado" por Rajoy.

Para el PP, Rajoy se proclamó vencedor del debate al tratar los "problemas reales" de los ciudadanos mientras que Zapatero "ha hecho un debate retroactivo" en el que, además, han quedado en evidencia "sus cesiones ante ETA".