En esta iniciativa, a la que tuvo acceso Servimedia, los socialistas reclaman, además, al Ejecutivo que exija a las centrales térmicas garantías suficientes para el consumo del carbón autóctono, de forma que el consumo de otras fuentes energéticas tenga sólo un carácter complementario.

Además, piden al Gobierno que las centrales térmicas incorporen dispositivos adecuados para prevenir la contaminación, mediante la impantación de las mejoras técnicas disponibles, cumpliendo la directiva medioambiental europea que fija un plazo transitorio máximo hasta el 30 de octubre de 2007.

Según argumenta el PSOE, el informe estudiado recientemente por la Comisión Europea, en el que se prevé la supresión de todas las ayudas a la producción del carbón a partir del 2010, "precisa una respuesta clara y urgente en defensa del mantenimiento de la actividad minera y de las subvenciones a la producción del carbón más allá de esa fecha.

Añaden que, aunque los argumentos del informe europeo se basan en la escasa viabilidad del sector y en la elevada contaminación ambiental que genera, "la minería ha demostrado su viabilidad al reducir los costes de extracción, tal y como exigía la normativa de la CECA y tiene acreditada su rentabilidad económica y social", puesto que proporciona a las arcas públicas unos ingresos "muy superiores" a las ayudas que recibe el carbón.