Ambas partes constataron su similitud de criterios al hacer un diagnostico muy negativo de la primera andadura del Gobierno de José María Aznar.

Para socialistas y Nueva Izquierda, este gobierno "nítidamente conservador" abre un nuevo ciclo político en el que la izquierda no puede seguir inmersa en la "nefasta cultura de la confrontación", en palabras de Diego López Garrido.

La entrevista, que se prolongó durante más de tres horas, se enmarca dentr de la ronda de encuentros que está manteniendo Nueva Izquierda con distintas organizaciones políticas y sindicales para explicarles su proyecto de transformarse en partido.

A la reunión de hoy, que se celebró en la sede del PSOE en la calle Gobelas de Madrid, acudieron por parte socialista Felipe González, Cipriá Ciscar, José María Benegas y Raimon Obiols. Por Nueva Izquierda estuvieron Diego López Garrido, Cristina Almeida, Ricardo Peralta y Juan Berga.

ENFRENTAMIENTO ESTERIL

López Garrido dio que la entrevista discurrió por un "muy buen clima de diálogo" constructivo, en la que la principal conclusión es el acuerdo de continuar manteniendo contactos en el futuro para buscar el acercamiento entre la izquierda.

El líder de Nueva Izquierda recordó que este tipo de reuniones no habían tenido lugar en España en los últimos ocho o diez años, lo cual es un "hecho desgraciado que explica el grado de confrontación estéril que ha vivido la izquierda española" y cuya culminación ha sido la pérdida e las últimas elecciones generales.

López Garrido explicó que ambas partes coincidieron en que la izquierda debe hacer al PP "una oposición eficaz, contundente y lo más coincidente posible".

Para ello, añadió, será preciso que los ciudadanos visualicen "una alternativa progresista, con propuestas concretas y no sólo de crítica a la derecha". "La izquierda", remarcó, "necesita entrar en una cultura de diálogo y acabar con la nefasta cultura de la confrontación practicada hasta ahora".

Según e dirigente renovador de IU, la colaboración entre las izquierdas no impedirá que PSOE e Izquierda Unida puedan seguir teniendo puntos de vista distintos sobre temas concretos desde su absoluta independencia.

En este sentido, dijo que en la reunión se puso de manifiesto que ambas partes rechazan que se siga hablando de la "casa común" de la izquierda o de la teoría de las "dos orillas" que cita a menudo Julio Anguita. "Son teorías absurdas e inaceptables", destacó López Garrido.

En el análisis quePSOE y Nueva Izquierda hicieron de las primeras medidas del PP, López Garrido mencionó como especialmente perjudiciales para ambas partes las medidas fiscales, que comentó que benefician a los más poderosos.

Frente al PP, enumeró una serie de acciones concretas que, según ambas partes, deben ofrecerse como alternativa a los ciudadanos: profundización en el Estado del Bienestar ante los "daños irreparables" que le puede ocasionar la derecha, construcción de una Europa solidaria desde el cumplimiento delos criterios de convergencia marcados en Maastricht o el desarrollo autonómico desde un punto de vista solidario.

CONFERENCIAS

López Garrido consideró que el sector oficial de IU no debe sentirse molesto con esta entrevista de hoy entre Nueva Izquierda y el PSOE, porque su corriente no busca representar a toda IU, sino sólo a una parte.

Aseguró que ve muy positivo para el diálogo en la izquierda la entrevista que van a mantener en fechas próximas Julio Anguita y Felipe González.

Cuando sele preguntó si el tema de Maastricht no podría seguir siendo el principal escollo para el entendimiento entre Anguita y el PSOE, señaló: "El objetivo no es buscar diferencias, que ya llevamos muchos años buscándolas. Ahora es el momento de buscar coincidencias. Las posiciones políticas no son inamovibles".

Cristina Almeida aseguró que con esta entrevista que han pedido al PSOE no tenían como objetivo "espolear" al diálogo de Julio Anguita con el PSOE, pero si ha servido para ello, bien venida será.

Por su parte, el secretario de Organización socialista, Cipriá Ciscar, valoró ante los periodistas el encuentro como "reunión franca y cordial". Subrayó la coincidencia de ambas partes en remover los obstáculos de diálogo que hay en el seno de la izquierda con el propósito de enfrentarse con fuerza a un gobierno que adopta medidas que sólo favorece "a unos pocos".

"Hay que promover un diálogo sincero en la izquierda. Los ciudadanos deben saber que existe una alternativa progresista", dijo Ciscar.

El dirigente del PSOE se refirió a las últimas declaraciones del Gobierno sobre las pensiones y manifestó que el PP tendrá a la izquierda enfrente con toda su fuerza para impedir que las pensiones no se revaloricen.

Ciscar explicó que el Comité Federal del PSOE discutirá a finales de este mes la propuesta de diálogo que ha recibido Felipe González de Anguita, y en función de esa discusión fijará la fecha para una entrevista entre ambos líderes.