Fernández explicó en Radio Nacional que la decisión de no estar en la nueva Ejecutiva socialista ha sido exclusivamente suya y destacó de ésta su juventud y que, si bien no es muy experta, tiene mucha ilusión y muchas ganas de iniciar un proyecto. "Hay que darles un voto de confianza, apoyarles y ver el rumbo que toman", indicó.

Tras señalar que desde el punto de vista ideoógico estará "vigilante", dijo que no es descartable que el "guerrismo" forme una corriente dentro del partido, pero negó que en cualquier caso se trate de una facción similar a la constituida en su día por Izquierda Socialista.

"Nosotros lo que pretendemos es aglutinar a los militantes que piensan que el Partido Socialista Obrero Español tiene que estar en una posición socialdemócrata, y eso lo haremos, y seguiremos teniendo reuniones, y haciendo papeles, y elaborando documentos, porque creemos que eo es ser responsables y estar comprometidos con nuestro partido", afirmó.

Matilde Fernández expresó su confianza en que el "guerrismo" no esté roto y subrayó que, a pesar de que Bono y Rodríguez Zapatero representan "más o menos lo mismo" desde el punto de vista político, el talante del primero y algunos de los nombres que aseguró iba a proponer si resultaba elegido dieron miedo a los delegados.

Añadió que Bono "tiene fama de ser una persona sin matices, que a quien no piensa como él tiende a excuirle", y "muchos compañeros eso no lo querían". "Sabían que Bono y Zapatero representaban ideológicamente una posición más moderada del socialismo, pero primaron los talantes personales", concluyó.