Ferández de la Vega resaltó el "nivel de nervisiosimo" que demuestra el PP cuando su "flamante y pretendido centrista secretario general, señor Arenas, da instrucciones a sus dirigentes regionales y provinciales para que lleven al PSOE a los tribunales".

"No podíamos caer en mayor disparate", opinó la dirigente parlamentaria socialista. "Mal lo hizo el PP en la oposición judicializando la política, pero más grave es si cabe que eso lo haga desde el Gobierno".

Recordó que la ponencia de Luisa Fernand Rudí en el XIII Congreso del PP hablaba de acabar con el hábito de derimir las contiendas políticas en los tribunales, antes de señalar que "no ha pasado todavía un mes y ya quieren de nuevo librarlas en los tribunales".

Para Fernández de la Vega, "el señor Arenas ha perdido los papeles y ha vuelto por sus fueros en la actitud claramente antidemocrática que tuvo en la noche electoral del 93, cuando cuestionó el resultado electoral y le tuvo que corregir Aznar de forma inmediata".

GOBERNAR EN SILENCO

"Es evidente", agregó, "que el PP quiere cerrarnos la boca, gobernar en silencio e impedir el debate político, porque no tiene argumentos para combatir temas de corrupción que están apareciendo y están obsesionados con que nosotros estamos detrás de los temas de corrupción". En ese sentido, se preguntó públicamente: "¿Estamos nosotros detrás del tema de Tenerife? ¿Ha denunciado el PSOE el tema de Tenerife?.

Para la dirigente socialista, "está claro" que los dirigentes del PP "no quieren que est país se entere de lo que está pasando y no se quieren enterar de que estamos en una democracia, una de cuyas cualidades es que los temas de corrupción salen a la luz".

Acusó a Arenas de haberse convertido "en el portavoz del silencio del Partido Popular, en el portavoz tapadera de los asuntos que no le vienen bien a Aznar y a su Gobierno".

"A nosotros", explicó, "no nos preocuparía demasiado esa amenaza de que nos van a llevar a los juzgados por denuncias que se refieren a temas suyos, si no fuee por la gravedad que implica de ataque a lo que es el respeto al funcionamiento de los poderes del Estado el volver a querer colocar a la justicia en la picota".

Concluyó que lo que tienen que hacer el Gobierno y los dirigentes del PP es dar explicaciones en el Paramento, "al que iban a hacer el centro de la vida política y lo tienen absolutamente arrinconado. Lo que tiene que hacer con las sospechas de corrupción que están apareciendo por toda la geografía es aclararlos y decir qué medidas están adotando".