El portavoz socialista en la Comisión de Defensa, Jesús Cuadrado, ha estado preparando durante las últimas semanas esta proposición, a la que acceso Servimedia, para garantizarse el apoyo de todos los grupos parlamentarios.

La iniciativa se basa en la ley 53/2007 sobre control de comercio exterior de material de defensa, que anima al Gobiernoa impulsar un Tratado Internacional sobre el Comercio de Armas, así como la prohibición de las bombas de racimo, en el ámbito de las Naciones Unidas y de la Unión Europea.

Por ello, el PSOE insta al Gobierno a que ponga en marcha "cuantas medidas sean necesarias, en el ámbito internacional, para conseguir con la mayor celeridad posible un Tratado sobre el Comercio de Armas (TCA), con el establecimiento de normas internacionales comunes para la importación, exportación y transferencia de armas convencionales".

Ese tratado, añade, debería ser un "instrumento eficaz para evitar la transferencia irresponsable de armas cuando éstas sean utilizadas para perpetrar violaciones de los derechos humanos, del derecho internacional humanitario y actos terroristas".

Además, la proposición reclama "una ágil aplicación en España de la Convención sobre Municiones en Racimo, firmada por el Gobierno el pasado 30 de mayo, en Dublín, así como una intensa acción internacional para lograr la vinculación al acuerdo de los Estados que aún no se han adherido al mismo".