Estos cuatro hombres, dos el representación del sector 'renovador' (Chaves y Lerma) y dos 'guerristas' (Ibarra y Benegas), fueon elegidos el lunes pasado para comunicar a González la marcha de la conversaciones.

Si bien aún no se puede hablar de un acuerdo concreto, sí parece clara la voluntad de los más estrechos colaboradores de Alfonso Guerra de llegar a un consenso en las próximas horas; un consenso que se revela bastante maduro, puesto que aunque no se descarta una nueva reunión del grupo, no han quedado emplazados para otro encuentro, como ocurrió en la primera reunión.

Sí habrá reuniones más restringidas de alguns de los miembros del ese grupo para acordar algunos flecos, como por ejemplo los nombres de los que pueden ocupar la presidencia de las comisiones y actuar como ponentes.

Tanto 'renovadores' como 'guerristas' destacan las ventajas de este sistema de negociación, porque en el PSOE "hay un cierto déficit de solidaridad y falta de convivencia en los últimos meses y estas cosas encarnan mejor si las asume mucha gente", indicó a esta agencia un colaborador de Guerra miembro de la Ejecutiva.

Por su pate, algunos 'renovadores' creen que González y Guerra no deben reunirse porque "sería una manera de presentar estos debates como una negociación en pie de igualdad, y no lo es. El secretario general hará una dirección integradora que no dará lugar al descontento y además no dará la impresión de que el Congreso está cerrado antes de celebrarse".

Los 'guerristas' están por "trabajar para construir un acuerdo", según confirmó un asistente a la reunión de lunes, y esperan que esta actitud sea apreciada enlas filas 'renovadoras'. La tesis de que el pacto es posible cunde en todos los ámbitos del partido y, de hecho, una fuente de Moncloa aseguró que "habrá acuerdo" porque hay voluntad de conseguirlo.