El secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, Diego López Garrido, reiteró en rueda de prensa que la respuesta al "plan Ibarretxe" debe ser firme, pero también serena.

Expresó a continuación su esperanza en que el PP contribuya a dar ese tipo de respuesta, y alertó de que las afirmaciones "alarmistas" y las propuestas "un tanto caóticas" lanzadas por el principal partido de la oposición no lo hacen.

López Garrido insistió en que el "plan Ibarretxe" será debatido democráticamente en el Congreso de los Diputados, y será también rechazado "democráticamente". Cuando hay discrepancias, afirmó, no se resuelven "a tortas", sino con debates y con los votos.

Ante las amenazas de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) sobre la retirada de respaldo al Gobierno en caso de rechazo a esta iniciativa, López Garrido sentenció que la posición del PSOE en este caso es coherente con el trabajo realizado por el partido desde el comienzo de la legislatura.

López Garrido aseguró que el PSOE y el Gobierno tienen voluntad de acuerdo con el PP y con esa intención acudirá el presidente a la entrevista con Mariano Rajoy.

Sin embargo, advirtió de que el PP debe colaborar también con esa actitud, algo que, por el momento, no está haciendo. "No se puede llamar al consenso retóricamente pero hacer propuestas de forma incontinente cada mañana que se sabe inaceptables y que da la impresión de que van dirigidas a la galería", dijo.