Según Eguiagaray, Borrell sólo fue elegido candidato a la Presidencia del Gobierno en las elecciones primarias, no sustituto de la dirección del partido, mientras que Almunia es el secretario general del PSOE y forma parte de una dirección "que había salido de un congreso.

"Ahora estamos ante el hecho de que los acuerdos que entonces se tomaron para dirigir y para conectar, para hacer compatibles las funciones de los unos y de los otros, se ponen en cuestión. El señor Borrell dice que él representa al Partido Socialista, y sin duda alguna que nos representa en muchísimas cosas, pero el problema está en que la representación no puede ser un ejercicio de sustitución de la dirección del partido, salvo que colectivamente decidamos que ya no queremos otra dirección del parido que no sea más que la que emana de quien ha sido elegido por todos y para todos como candidato a la Presidencia", añadió.

Destacó que esta situación es un problema colectivo, y no una cuestión personal entre Almunia y Borrell. Asimismo, aclaró que igual que el Comité Federal estableció las reglas de juego para las primarias, es ahora este órgano el que tiene que decir "cómo quiere que funcionen las cosas".

Finalmente, sobre el peligro de que el electorado castigue a su partido por las tensions internas y la posibilidad de que Aznar decida adelantar la convocatoria electoral, Eguiagaray dijo que "nos seguirá cogiendo preparados para las elecciones, por mucho que quiera adelantar".