El acuerdo general lo explicaron hoy en rueda de prensa los responsables de Política Municipal del PSOE, Alvaro Cuesta, y de Izquierda Unida, Inés Sabanés.

Antes de la constitución de los ayuntamientos, ambos suscribieron una declaración marco en la que se basan estos acuerdos y en la que señalan como prioridades de estos gobiernos locales materias como el empleo, la seguridad, la ayuda a las familias y el acceso a la vivienda.

De los más de 8.100 ayuntamientos españoles, enunos 1.350 las elecciones del 25 de mayo no arrojaron una mayoría clara, y es en ellos donde se fraguan estos acuerdos. En concreto, PSOE e Izquierda Unida gobernarán con apoyo mutuo en 269 de estos municipios, a los que suman otros 40 en Cataluña, donde las formaciones de izquierda concurren en circunstancias distintas al resto del país.

La mayoría de estos acuerdos se suscriben en ayuntamientos de más de 5.000 habitantes y, en conjunto, serán unos cinco millones de ciudadanos los directamente goberndos por ellos.

Las comunidades donde más acuerdos municipales suscriben son Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y Cataluña.

Pese al protocolo general de entendimiento, y a pesar de que la dirección de Izquierda Unida acordó no facilitar gobiernos del PP ni activa ni pasivamente, ambos reconocieron que hay algunos ayuntamientos pequeños donde el acuerdo PSOE-IU puede no cumplirse, y confían en que sean "la anécdota".

El acuerdo general se basa en la valoración que amba formaciones hacen del suscrito en la anterior convocatoria electoral, la de 1999, y de la tradición de entendimiento municipal de la izquierda desde el comienzo de la democracia.

En esta declaración conjunta, y después de lo sucedido en la Asamblea de Madrid, socialistas e Izquierda Unida se comprometen a permenecer "vigilantes" en los ayuntamientos para velar por el cumplimiento de los acuerdos contra el transfuguismo.