Según Carmen Sánchez Carazo, concejala socialista responsable de salud y discapacidad, los voluntarios de este servicio municipal carecen de un buen seguro que cubra los daños que puedan ocasionarse durante el ejercicio de su actividad. "El seguro que tienen no cubriría en caso de accidente gastos superiores a 3.000 euros ni una baja laboral", aseveró la edil del PSOE.

En opinión de la concejal opositora, estos voluntarios no están protegidos, como exige la ley, con la ropa y la indumentaria adecuada para hacer frente sin riesgo a las tareas que desarrollan. La mayoría carece de cascos, gafas o protectores auditivos y muchos de ellos no tienen la ropa adecuada para trabajar en situaciones de peligro: chalecos reflectantes, impermeables, forros polares o botas.

Asimismo, los socialistas critican que, pese a que la ley obliga al Ayuntamiento a abonar los gastos que tengan durante la realización de sus tareas, el Consistorio sólo les abona cuatro euros en concepto de ticket de comida a los que llevan a cabo labores especiales. Además, denuncian que a aquellos que cubren los retenes no se les proporciona ninguna aportación para comida.