Lo dijo en una rueda de prensa en Bruselas (Bélgica) después de que firmara con el secretario general de Junts, Jordi Turull, un acuerdo para la investidura del jefe del Ejecutivo en funciones y candidato socialista, Pedro Sánchez, que incluye una ley de amnistía para los involucrados en el ‘procés’.

Al anunciar este acuerdo para la investidura de Sánchez como presidente del Gobierno, aludió a la “oportunidad histórica” que se abre para “resolver un conflicto que sólo desde la política puede y debe resolverse”, ya que “sólo desde la negociación deben resolverse los desencuentros”.

En su intervención, el ‘número tres’ del PSOE arguyó que este acuerdo ha sido suscrito por dos formaciones políticas con “discrepancias profundas, pero que son capaces de lograr puntos de encuentro para el bienestar de los ciudadanos y la solución de los problemas”. “Llega en un momento clave para el país”, subrayó.

Defendió así que “es necesario formar cuanto antes un Gobierno progresista que dé estabilidad a España y que dé cumplimiento al mandato de la ciudadanía” en los pasados comicios generales del 23 de julio. Según dijo, los españoles “dijeron no” a un Ejecutivo del PP y Vox y “sí” a uno liderado por el PSOE que trabaje por “la convivencia, las políticas de igualdad y el progreso”.

“ETAPA HISTÓRICA”

Subrayó que han pasado seis años desde 2017 y “el conflicto de fondo” en Cataluña “sigue sin resolverse”, lo que le sirvió para refrendar que el pasado dado por PSOE y Junts permite “abrir una nueva etapa histórica en la que a partir del respeto y el reconocimiento del otro se busque una solución política y negociada”.

Apuntaló así su mensaje de que “la oportunidad es real y la voluntad, también”. El objetivo, apuntó el dirigente del PSOE, es “abrir paso a una legislatura que nos permita avanzar y construir una sociedad abierta y moderna, un país mejor, consolidar logros conseguidos y no dejar que el pasado condicione el futuro”.

Por ello, dejó claro que el acuerdo suscrito entre ambos “no es de investidura”, sino “de legislatura” entre dos partidos que, según trasladó, han hablado de “dar estabilidad a la legislatura de cuatro años” y hacerlo incluyendo en su pacto una ley de amnistía cuyo contenido se dará a conocer cuando sea revisada por los “partidos que quieren apoyarla”.

En esta comparecencia en la que dio cuenta de que la ley de amnistía está “acordada”, el secretario de Organización de los socialistas insistió en que la tienen que ver el resto de potenciales socios que apoyarán a Sánchez en su investidura y por eso no se presenta “ahora” la norma.

No obstante, anticipó que esta norma cubrirá a todas las personas que están relacionadas con el ‘procés’ “desde 2012 a 2023” y reconoció que una de las causas que ha demorado el acuerdo ha sido la reciente imputación por terrorismo del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont. A pesar de ello, mostró su confianza en la constitucionalidad de la norma.

“NO NOMBRES EN PARTICULAR”

Esta ley de amnistía, indicó, cubrirá “a la gente que ha estado relacionada con el ‘procés’ desde sus inicios hasta la fecha en la que cerramos el acuerdo”. A partir de ahí, abundó en que “no somos nosotros”, sino que “serán los jueces” los que “valoren si cubre a unos u a otros”. Eso sí, trasladó que “no se ha hablado de nombres en particular”.

Además, Cerdán aprovechó para decir que no entiende que el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, “sin conocer la ley de amnistía”, le pida al Gobierno de España “algo que no puede tener porque es un acuerdo entre partidos políticos”. A partir de ahí, recalcó, la ley se llevará al Congreso y será el Legislativo la que la apruebe.

“Poco le puede dar el Gobierno al comisario Reynders sobre la ley de amnistía. Estoy seguro, además, de que es una ley bien trabajada”, reseñó, al tiempo que se refirió a los recursos ya anunciados por el PSOE y por Vox que llevarán al Constitucional a revisarla y ver “si es constitucional o no”. “Estamos seguros de que así lo será”, sentenció.

“El acuerdo es un acuerdo político y un acuerdo también por la ley de amnistía”, enfatizó, y sobre la fecha de investidura se remitió a que será el propio candidato el que tendrá que contar a la presidenta del Congreso que “tiene los votos suficientes” y será ella quien convoque el Pleno para que sustancie dicho debate.

"LÍNEA ROJA" DE LA CONSTITUCIÓN

En cuanto a la posibilidad de la celebración de un referéndum de independencia, el secretario de Organización de los socialistas testimonió que se ha hablado de ello con Junts y saben que la “línea roja” del PSOE es la Constitución española, por lo que “cualquier cosa” que se haga será “dentro” de la Carta Magna.

Preguntado por el posible reconocimiento de Cataluña como nación y cómo queda recogido en el acuerdo suscrito hoy, reconoció que ha sido uno de los debates “importantes”. “Pero la propia Constitución habla de nacionalidades” y “es uno de los temas que tenemos que seguir hablando”, señaló.

Explicó que ambos partidos han quedado en trabajar “en unas mesas de trabajo durante estos cuatro años” y que hoy lo que se ha logrado es “un acuerdo político y sobre la amnistía” estableciendo la metodología de las mesas para abordar “los temas de más influencia” a la ciudadanía, como pueda ser Rodalies o “el tema de la identidad de Cataluña”.

Así, “cada uno desde sus posiciones”, comenzarán a trabajar en dichas mesas. En todo caso, tras muchas jornadas de trabajo y reconocer que ha sido “duro” e “intenso” llegar al objetivo, el dirigente del PSOE aseguró que en sus filas están “muy contentos” con el acuerdo, como también dijo que lo están en Junts.

“No era fácil llegar”, pero se ha logrado “un acuerdo satisfactorio” para ambas partes, garantizó. En cuanto a cómo va la negociación con el PNV, cuyo apoyo se antoja también imprescindible para que prospere la investidura de Sánchez, Cerdán mostró “la confianza” de que salga adelante.

“No he estado estos días hablando con ellos, evidentemente no era mi ámbito de negociación estos días”, dijo tras estar centrado en el pacto con Junts. No obstante, el secretario de Organización de los socialistas se mostró “seguro” de que si “no está cerrado” el pacto con el PNV, estará “a punto” de hacerse.