En una nota de prensa, "la decisión adoptada por el ministerio -sin duda acertada y justificada- sobre un producto de uso muy común n la población infantil ha suscitado una lógica preocupación que debe ser disipada cuanto antes".

La secretaria de Consumo del PSOE mostró su preocupación porque haya sido la propia empresa, y no un control o inspección sanitaria, la que haya detectado la contaminación por bacterias de un producto que lleva dos años en el mercado.

En opinión de la responsable de Consumo del PSOE "cuánto antes queden despejadas éstas y cuantas dudas puedan tener aún las personas que habitualmente utilizan este proucto, más y mejor se estarán atendiendo los derechos de los consumidores que lo utilizan".

Pozuelo confía en que el Gobierno "ponga todos los medios a su alcance para garantizar la retirada del mercado de los lotes afectados por esta contaminación, en el menor tiempo posible. La rapidez con que se haga contribuirá también a trasladar tranquilidad a los consumidores".