El dirigente socialista insistió en que el espíritu de este programa no esconde un "odio social a los poderosos", sino que su partido entiende que los que menos tienen son los que más precisan la ayuda y la cercanía de las instituciones. "Nuestro programa", subrayó Bono, "es contra nadie y a favor de los más necesitados".

El responsable socialista dijo que en su partido no están disciplinados como "si de un cuartel se tratara", pero "estamos más unidos qu nunca en torno a Rodríguez Zapatero". Asimismo, fue rotundo al afirmar que en el PSOE coinciden todos en lo que es esencial, aunque todos piensan.

Aprovechó para arremeter contra el PP, partido en el que, dijo, la unanimidad parece que obedece al hecho de que "allí solo piensa uno por todos, y ahora no se sabe quién es el que piensa, o no piensa ninguno. Así son las unanimidades a la búlgara", reseñó.