Así lo contempla la 'Declaración del PSOE con el compromiso con la Sanidad pública universal y de calidad' difundida por el partido tras la larga reunión de la Ejecutiva federal del PSOE y con el eco de la manifestación en defensa de la sanidad publica de este domingo en Madrid y otras ciudades.

De hecho, en la rueda de prensa posterior a la reunión, la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, aseguró que el "90%" de las conversaciones en la reunión de la dirección habían versado sobre la sanidad pública y sobre cómo "blindar" el pilar del Estado del bienestar "más importante construido en democracia".

Porque, dijo Montero, hay "pocas conquistas con tanto impacto en el día a día de los ciudadanos como la sanidad pública" y de ahí la reafirmación del PSOE en el "compromiso" por un sistema sanitario público, gratuito y universal.

En la declaración del PSOE se lanza un “aviso a las ideologías que entienden la enfermedad de las personas como un negocio” porque “la prioridad del Estado es el bienestar de sus ciudadanos”, dice el texto, en el que también se recoge que “no caben en esa declaración ni matices ni añadidos perversos”.

“Si se vende la sanidad de todos a empresas de unos pocos, se está cruzando una línea roja, y ahí estaremos desde el PSOE para acabar con cualquier retroceso” con un “compromiso” que es “firme”. “Estaremos en la calle y en las administraciones públicas, en los parlamentos y en los hospitales, sin dar un paso atrás. Nos habéis elegido para ello, y cumplimos con ese mandato”, avisa el partido.

Acto seguido, los socialistas alertan de que “el PSOE va a hacer honor a su historia” y “cualquier intento de desmantelamiento del sistema público de salud en el ámbito de las comunidades autónomas contará con el rechazo frontal de nuestro partido”.