Totorica compareció ante los medios de comunicación enfadado por el hecho de que la mayoría victoriosa le achcara la imposibilidad de llegar a un acuerdo sobre la composición de la Ejecutiva.

Según dijo, la oferta de que entrara en la dirección acompañado de dos más de sus seguidores, no era proporcionada respecto al respaldo del 37 por ciento conseguido por su candidatura en la votación de ayer y a "la mitad social del partido" que cree representar.

A su juicio, ha faltado "generosidad" en el sector vencedor que no le ha planteado una "oferta seria e integradora" que pudiera aceptar.

Pese estas qujas, Totorica garantizó su "lealtad" y la de los suyos con la nueva dirección a la que dará un "margen de confianza" para que pueda empezar a actuar, con la esperanza de que "acierte" en sus decisiones.

Insistió en que no es imprescindible estar en la Ejecutiva para seguir trabajando por el proyecto socialista y aseguró que él y sus seguidores continuarán desempeñando sus tareas en los ayuntamientos y cargos públicos y dentro del partido.

En cuanto a la supuesta intervención de la Ejecutiva Federl en la formación de la nuevas dirección, insistió en que el PSE es el responsable de todo lo hecho este fin de semana en el Kursaal donostiarra y que la Ejecutiva que salga de aquí es fruto de un pacto orgánico entre vizcaínos y guipuzcoanos.