Karrera declaró a Servimedia queeste cambio en la dirección tendrá repercusiones "positivas" en la política vasca, aunque en el seno del PSE quedarán heridas "que tardarán en cicatrizar, si es que cicatrizan".

El portavoz de Izquierda Unida en el País Vasco recordó que "Redondo dimitió porque no podía llevar adelante su política, y ahora han ganado precisamente las personas que no estaban totalmente de acuerdo con la lectura que hacía" el ex secretario general, "y eso se tiene que notar en alguna medida".

"Espero y creo que ser de forma positiva", prosiguió, "porque la dinámica en la que se encontraba el PSE con los planteamientos de Redondo estaba favoreciendo las posiciones del PP, y si el Partido Socialista quiere consolidarse tendrá que hacer su propia política y responder específicamente a los problemas que tenemos en el País Vasco".

En cuanto al hecho de que no se haya integrado en la Ejecutiva a ningún miembro del sector que apoyara la candidatura de Carlos Totorica, y sólo a una persona del sector de Gemma Zabaletatítulo particular, dijo que "no es buena señal, porque significa que de alguna forma se mantienen las posiciones de antes del Congreso", en cuanto a las discrepancias internas.

Karrera apuntó que "los resultados son los previstos, tal y como se había desarrollado el debate y la elección de delegados, pero otra cosa es la capacidad que pueda tener Patxi López para integrar en el partido todas las diferencias que se han manifestado, y a este nivel lo tiene relativamente difícil".

El que no se hayaintegrado a miembros de los otros sectores, agregó, "no es bueno, porque un partido necesita unidad por encima de todo". "El enfrentamiento ha sido muy duro anteriormente y eso requerirá tiempo para cicatrizar las heridas, si es que las cicatriza".