Coll dijo hoy a Servimedia que un óvulo fecundado es un nuevo ser humano, por lo que "fecundar varios óvulos y utilizar los sobrantes para investigación es manipulación de la vida humana".

"Además", añadió, "cuando estos embriones se destruyen porque no cumplen las expectativas que se requieren para el caso concreto de la investigación, se está destruyendo vida humana. Es provocar un aborto, aunque sea en las primeras semanas", subrayó.

En relación con la posibilidad de seleccionar embriones compatibles para salvar la vida de un hijo enfermo, Coll señaló que el ser humano "es un bien en sí mismo" y que crear una vida para que sirva de curación a otra es "hacer que ese ser humano que se crea se utilice como medio y no como fin".

"Un padre y una madre han de querer a cualquiera de sus hijos porque son un bien en sí mismos, no porque les sirva para curar a otro", dijo Coll, que se solidarizó con el sufrimiento de los padres con un hijo enfermo.

"No podemos caer en la trampa del sentimiento, porque estamos alterando el orden de los valores. El método para resolver la enfermedad de un hijo no es éste", concluyó.